Mr. preceptor

Es la tercera vez que hablo con él de esta manera.
El viernes eran las 16.30 y yo ya estaba saturada. Los recuerdos del 28 de octubre del 2001 me estaban dando vueltas y vueltas y la cabeza estaba a punto de explotar.
Así que me levanté de la silla, le pedí permiso a mi profe divina y le dije: Voy con Claudio.
Cuando entré en la preceptoria, no permiso pedí, solo me senté en la silla que estaba vacía. Él ya sabía que yo estaba mal.
C: ¿Te peleaste con el otro?
Y: No
C:¿Y entonces qué carajo te pasa?
Y: Nada...

Y después de quince minutos mirando la reja, empecé a hablar. Le conté todo, por qué estaba mal, como son las cosas en mi familia,cómo me va con mis amistades, mis planes a futuro, todo.
Me hizo darme cuenta que tan mal no estoy, que después de todo soy un poco fuerte, y que se podría decir que soy bastante optimista.
Si bien, parece que le doy mucha bola a cosas insignificantes, le doy importancia a las cosas necesarias.
Me hizo darme cuenta que no esta nada mal ser un poco egoísta, después de todos somos humanos.

Y: ¿Tu mujer es el amor de tu vida?
C: No
Y:¿Entonces no la amas?
C: Si la amo, pero si hay alguien por el que doy mi vida y no lo pienso, es por mis hijas.
Y: qué tierno
C: es de egoísta, porque quiero algo eternamente, solo porque sé que es mio. Tu esposa se puede ir, pero tus hijos van a ser siempre tuyos.
Y: No está mal
C: si está mal no me importa.

Le traté de explicar en pocas palabras, en las cosa que creía,pero me di cuenta que me resulta imposible y que no lo puedo explicar. Así que desde ayer me resigné a explicarle a alguien lo que creo, me conformo con entenderme yo misma.

Le comenté que voy a escribir un cuento y que él va a aparecer. Me dijo que no le gusta, que tampoco le gusta aparecer en las fotos.

C: Me gusta mirar las cosas de otra perspectiva
Y: ¿Cómo lo mirás desde otra perspectiva sin aparecer? ¿No querés quedar registrado?
C: ¿Soy un tipo complicado no?
Y: son gustos, conozco a otras personas que no les gusta aparecer en las fotos

Para variar un poco, hablamos de la inmortalidad, si es que realmente morimos, si "habrá alguien que nos aguarde de nuestra doble ausencia larga", y qué pasará después.

Cada vez me gustan más estas charlas, cada vez me siento más feliz.