Siganme los buenos

meltdown

tuve una super semana y un super fin de semana.
Que las pruebas finales, que las rifas, que el torneo, que el cine, que mi casa, que mi vieja y que mi hermana,
y ayer a la noche cuando le di el fin a la super semana dormí como un ángel.
Lo mejor fue despertarme hoy y ver que mi mamá había comprado un nuevo tarro de miel (para ponerle a mis ricas tostadas).
Más tarde la vieja se fue de shopping, y trajo regalitos.
Pudimos sacar un mueble viejo (además de feo y roto y grande) y reemplazarlo por unas prácticas cajas de plástico. Lo impresionante fue ver la cantidad de cosas al pedo que había en esos cajones.
Creo que el mueble tenía 9 cajones, todos llenos de cosas. Al final de la tarde, todo entró en 3 cajas.
Es increíble como las personas (en este caso mi familia) tienden a guardar chucherías. Entiendo que hay cosas cargadas de recuerdos: cartitas, fotito, dibujito, cintita, cadenita, esponjita.
Pero llega un punto en que la chuchería te consume y pasa a ser: OKUPAS.
Así que hicimos lo mismo que con los okupas (luego de un gran esfuerzo) los hicimos desaparecer.
Aunque igual, no es que se hayan ido completamente (porque sigue habiendo okupas en otros lados), solamente sacamos los que había en ese mueble. Supongo que próximamente sacaremos a los otros.

Y el otro buen regalo fueron las plantitas. Mamá compró muchas plantitas de muchos colores.
El balcón ahora tiene más vida. Antes teníamos plantas verdes, ahora hay florcitas de colores.
Mínimo me quedé una hora viéndolas cuando ya estaban plantadas.



ahora me voy a ver Rango, la peli esa del camaleón.

2 comentarios:

Lulinda dijo...

señora fotografa, sacale fotitos y subilas :D

Funes de la Torre dijo...

Muy de acuerdo con el primer comentario, y ademas quiero comentar que me gusto mucho su semana, me alegro que le vaya biens
Saludo,
Funes

PD: lo de los okupas es cierto, abajo de mi cama tengo miles.